El Terror fue uno de los géneros novelescos tratados en el Taller de escritura creativa en el que asisto cada semana, pero ¿cómo provocar miedo en la literatura? En el cine de terror los sustos o miedos son visuales (un portazo, un monstruo que aparece, sangre mucha sangre), pero ¿cómo conseguir que tenga miedo el lector? Lo importante, nos comentó el profesor del garaje literario, es sugerir el miedo más que describir lo que te lo provoca.
También nos contó la diferenciación entre los motivos literarios para generar miedo del siglo XIX basados en lo sobrenatural, con los clásicos fantasmas, tumbas y castillos encantados, y los del miedo del siglo XX, los actuales, más centrados en lo psicológico, en la mente de la persona, en sus miedos interiores (aquí es donde las teorías de Freud cobran importancia).
En resumidas cuentas, a la hora de escribir un relato que cause pavor se ha de crear primero una atmósfera determinada, caracterizar a un personaje que nos podamos poner en su piel (no tiene que ser un héroe), ir montando escenas que le den un ritmo, y, finalmente, tener un final con una acción que puede ser contundente. Para instruirnos de todo ello leímos el cuento «La gallina degollada» de escritor Horacio Quiroga, que os aconsejo que no dejen de leerlo.
Para la semana que viene, el transilvanés profesor nos ha mandado escribir un relato de terror. Yo le tengo miedo al folio en blanco. Espero que Stephen King me inspire.
Carles Valls, publicar un libro.com